martes, 18 de agosto de 2009

Pecepecera


Descálzate pero para arañarte de tierra la piel y las raíces.

Despierta, quítate las gafas para ver menos y llenarte los ojos de aire.

Las hojas están moviéndose.

Vienen las tormentas y las lunas y no vas a estar si no a tiempo para recibirlas.

Ahí, afuera.

Apágame y corre.

2 comentarios:

Eugenio dijo...

Aquí andamos mi querida amiga, en visita a tu blog, este pensamiento es muy bueno, me ha gustado mucho por no decir que me ha encantado.

Disculpa la tardanza, andaré por acá seguido

Un beso

Natalia Gibert dijo...

graciaaasss!!!!Hasta la vista!