jueves, 24 de junio de 2010

¡vámonos!




 De nuevo el viaje. El placer. El viaje. Viajo con la compañera de siempre y con más ganas que nunca. Afilamos otra vez los dedos para tocarlo todo como por vez primera. Lustramos las botas ajadas de barros de tierras lejanas, para que caminen limpias.  Le guiñaremos el ojo al aduanero para que nos selle de una muchas futuras entradas y salidas a esos lugares por conocer; reiremos del día a la noche, y susurraremos gracias a los oídos secretos de la gente nueva que se deje conocer...

Lo invisible que se viene huele a sal, pan blando y rocas mojadas. Verano. El viaje.
Cualquier rincón del mundo, un breve y maravilloso hogar.